ISO 45001, ISO 14001 y la cultura de EHS: ¿juguetes sin pilas?

Los sistemas ISO sin cultura son como un juguete sin pilas. Descubre cómo la NOM-035 y modelos como NOSACQ-50 ayudan a interpretar y transformar la cultura EHS.

Dr. Christian Quiñones

9/7/2025

Introducción

👶 Esta semana observé a mi hija de 10 meses jugando con un juguete sin pilas.

Se reía, lo movía, lo mordía… pero algo faltaba. El juguete estaba ahí, pero no funcionaba como debía.

Un juguete sin pilas puede entretener por un momento, pero no cumple con todo su potencial. Lo mismo ocurre con los sistemas de gestión de Seguridad y Salud en el Trabajo (ISO 45001) y de Gestión Ambiental (ISO 14001): los documentos pueden estar completos, las auditorías superadas y los certificados colgados en la pared, pero sin una cultura organizacional sólida en EHS, el sistema se queda incompleto.

Este artículo analiza por qué la cultura es el verdadero “motor” de los sistemas de gestión, cómo medirla y qué pasos prácticos se pueden dar para integrarla en la estrategia empresarial.

1. Los sistemas de gestión: estructura sin energía

Las normas internacionales como ISO 45001 y ISO 14001 proporcionan un marco sólido:

ISO 45001 establece los requisitos para gestionar riesgos de seguridad y salud ocupacional, con enfoque en la mejora continua y la participación de los trabajadores (ISO, 2018).

ISO 14001 orienta la gestión ambiental hacia la sostenibilidad, minimizando impactos negativos y cumpliendo obligaciones legales (ISO, 2015).

El problema surge cuando estos sistemas se convierten en ejercicios burocráticos: procedimientos que se cumplen en papel, pero que no generan cambios reales en la conducta de los trabajadores ni en la toma de decisiones.

2. El papel de la cultura en EHS

La cultura de EHS se refiere al conjunto de valores, creencias y actitudes compartidas que determinan cómo las personas perciben y actúan frente a la seguridad, la salud y el medio ambiente.

Hudson (2001) propone el modelo de madurez cultural en seguridad, que va desde la cultura “patológica” (ignorar riesgos) hasta la “generativa” (la seguridad es parte integral del negocio).

La Agencia Europea para la Seguridad y la Salud en el Trabajo (EU-OSHA, 2018) señala que una cultura positiva reduce la accidentabilidad, mejora la motivación y fortalece la competitividad.

Estudios de Reason (1997) sobre error humano demuestran que la cultura determina si los trabajadores reportan, aprenden y mejoran tras incidentes.

En otras palabras, sin cultura, el sistema está muerto en vida.

3. Cómo medir la cultura en EHS

A diferencia de una auditoría documental, medir cultura requiere herramientas específicas:

NOSACQ-50: Cuestionario de clima de seguridad desarrollado por la Universidad de Lund, Suecia. Evalúa percepciones en confianza, justicia y aprendizaje organizacional (Kines et al., 2011).

Modelo de Maturity de Hudson: permite identificar el nivel cultural de una organización y diseñar planes de evolución.

Indicadores proactivos: participación en programas de seguridad, número de reportes de actos inseguros, cumplimiento en pausas activas o ergonomía.

👉 Un ejemplo relevante en México es el cuestionario de la NOM-035 STPS. Según la postura de Charly Wigstrom (El gran malentendido: la cultura no se mide, 2025), estas encuestas reflejan síntomas y percepciones de los trabajadores, pero no la cultura en sí misma. Correcto.

Desde mi visión práctica, esas percepciones son datos útiles: permiten detectar señales tempranas, orientar diagnósticos y diseñar estrategias de intervención. No sustituyen la cultura, pero actúan como una brújula organizacional que ayuda a ponerle “pilas” a los sistemas de gestión.

4. Estrategias para “ponerle pilas” a los ISO

Para que ISO 45001 y 14001 tengan impacto real, es necesario:

1. Liderazgo visible: la alta dirección debe dar ejemplo, no solo firmar políticas.

2. Participación activa: trabajadores involucrados en identificar riesgos y proponer mejoras.

3. Comunicación clara y cercana: mensajes que trasciendan lo técnico, que conecten con la vida diaria.

4. Integración con el negocio: EHS no como requisito legal, sino como valor estratégico.

5. Medición cultural: aplicar encuestas, focus groups y modelos de madurez para identificar áreas de mejora.

Conclusión

Los ISO 45001 y 14001 son herramientas poderosas, pero por sí solas no garantizan una mejora real. La cultura de EHS es la batería que les da vida: impulsa la prevención, convierte los sistemas en motor de cambio y asegura que la seguridad y el medio ambiente sean parte esencial del ADN empresarial.

Un juguete sin pilas puede entretener… pero nunca cumplirá su propósito. De igual forma, una empresa sin cultura EHS puede certificar procesos, pero no alcanzará la verdadera prevención ni la sostenibilidad.

Referencias

International Organization for Standardization (ISO). ISO 45001:2018 – Occupational health and safety management systems.

International Organization for Standardization (ISO). ISO 14001:2015 – Environmental management systems.

Hudson, P. (2001). Safety Culture – Theory and Practice. Safety Science, 34(1–3).

Kines, P., Lappalainen, J., Mikkelsen, K. L., Olsen, E., Pousette, A., Tharaldsen, J., … Tómasson, K. (2011). Nordic Safety Climate Questionnaire (NOSACQ-50): A new tool for measuring safety climate. International Journal of Industrial Ergonomics, 41(6).

Reason, J. (1997). Managing the Risks of Organizational Accidents. Ashgate.

European Agency for Safety and Health at Work (EU-OSHA). (2018). Healthy Workplaces Manage Dangerous Substances.

Wigstrom Broncheur, C. (2025). El gran malentendido: la cultura no se mide. Newsletter Humanos y Gestión de Seguridad, LinkedIn